Apple y OpenAI han solicitado a un juez federal de Estados Unidos que archive la demanda presentada por xAI, la firma de inteligencia artificial de Elon Musk, que les acusa de limitar la competencia en el mercado de la IA. Las compañías descartan cualquier pacto de exclusividad y niegan que la integración de ChatGPT en los dispositivos de Apple perjudique a terceros.
Según los escritos remitidos al tribunal, la alianza entre ambas empresas no impediría la entrada de rivales, pues Apple asegura que su acuerdo no es exclusivo y que prevé colaborar con otros modelos generativos. xAI, por su parte, reclama miles de millones en daños y sostiene que la visibilidad de sus productos —como Grok o la app X— habría quedado mermada por ese entendimiento.
Qué sostiene cada parte ante el juez
En su defensa, Apple insiste en que la colaboración anunciada en junio de 2024 se limita a integrar ChatGPT en iPhone, iPad y Mac como opción, y que no impide sumar otros chatbots a su ecosistema. La compañía rechaza que haya un trato de favor en la App Store motivado por un pacto exclusivo con OpenAI.
La denuncia de xAI, presentada en agosto, acusa a las demandadas de “bloquear mercados” para mantener posiciones dominantes e impedir que innovadores como X y la propia xAI compitan en igualdad de condiciones. Además, afirma que Apple carecería de incentivos para dar visibilidad a X o Grok debido a ese supuesto acuerdo preferente.
OpenAI, en un escrito por separado, sostiene que Musk ha emprendido una “campaña de guerra legal” contra la compañía y ChatGPT, y subraya que xAI no ha detallado un perjuicio concreto y no especulativo derivado de la integración en determinados iPhone. A su juicio, las alegaciones no encajan con el tipo de daño que persigue sancionar la normativa antimonopolio.
En esta fase procesal, Apple y OpenAI buscan que el caso se cierre sin pasar a pruebas, al considerar que la demanda carece de base suficiente. xAI, consultada fuera del horario laboral, no respondió de inmediato a la petición de comentarios sobre estas solicitudes de desestimación.
- Apple: acuerdo no exclusivo y apertura a más socios de IA.
- OpenAI: falta de daño real y crítica a la estrategia legal de Musk.
- xAI: acusaciones de cierre de mercado y petición de indemnización multimillonaria.
La integración de ChatGPT en Apple y el telón de fondo con Musk
El acuerdo revelado a mediados de 2024 llevó a que ChatGPT se ofreciera como herramienta dentro de iOS, iPadOS y macOS, lo que multiplicó su presencia entre usuarios de Apple. La tecnológica subraya que se trata de una integración como opción y no como exclusividad, y que su hoja de ruta contempla entenderse con más modelos de IA generativa, aunque algunos analistas se preguntan si Apple está perdiendo el tren de la IA.
Para xAI, esa decisión habría elevado el listón de entrada para alternativas como Grok, al tiempo que reducía la visibilidad de sus aplicaciones frente a la propuesta de OpenAI. Apple replica que el ecosistema de la App Store funciona con criterios que no dependen de un supuesto acuerdo preferente, tesis que también sostiene en sus escritos ante el juez.
El pulso judicial se enmarca en una relación compleja entre Musk y OpenAI. De forma paralela, el empresario mantiene otra causa en California contra la compañía y su CEO, Sam Altman, en la que busca frenar la transformación de la organización desde su modelo original sin ánimo de lucro hacia una estructura con fines de lucro. Musk fue cofundador de OpenAI en 2015.
Más allá del cruce de acusaciones, la disputa pone el foco en los estándares antimonopolio aplicables a integraciones tecnológicas en plataformas con gran base de usuarios. De momento, las demandadas sostienen que no se ha acreditado un daño competitivo real y que el mercado seguirá abierto a más opciones.
La cronología es clara: integración anunciada en junio, demanda interpuesta en agosto y ahora peticiones de archivo por parte de Apple y OpenAI. La continuidad del caso dependerá de si el tribunal considera suficientes las alegaciones de xAI o si, por el contrario, acepta cerrar el procedimiento en esta fase inicial.
Con este movimiento, Apple y OpenAI buscan zanjar cuanto antes un litigio que cuestiona su acuerdo técnico, mientras xAI trata de demostrar que la estrategia de integración afecta a la competencia y a la visibilidad de sus productos. Por lo pronto, el juez tiene la última palabra sobre si la disputa avanza o se queda en el camino.
