El artista puertorriqueño ha sido elegido para comandar el espectáculo del descanso de la gran final de la NFL en Santa Clara. La confirmación del Apple Music Halftime llegó de la mano de la NFL, Apple Music y Roc Nation, sellando que Bad Bunny será el protagonista del show en el Levi’s Stadium.
La cita está fechada para el 8 de febrero en el Super Bowl LX, un escaparate global en el que el cantante elevará su propuesta a una audiencia masiva. En su comunicado oficial, el propio artista subrayó que este logro tiene un fuerte componente cultural y emocional, un tributo a su país y a la comunidad latina que lo respalda, remarcando que actuará en el escenario más visto del deporte.
Detalles del anuncio y la fecha

La NFL comunicó oficialmente que el show tendrá lugar en el Levi’s Stadium, en Santa Clara (California), con Bad Bunny al frente del Apple Music Halftime. La elección se desveló un domingo durante la temporada regular, reforzando la estrategia habitual de la liga de capitalizar momentos de máxima exposición.
Desde la organización destacaron su capacidad para conectar con públicos diversos y su versatilidad en directo. La ligazón con Apple Music se mantiene como parte del patrocinio del espectáculo, una alianza que busca impulsar el alcance digital y ampliar las audiencias del descanso del partido, con especial foco en el público joven y multicultural.
El artista, conocido por mezclar trap latino, reguetón y sonoridades caribeñas, ya había tenido un guiño con el Super Bowl en 2020 cuando subió como invitado al escenario junto a Shakira y Jennifer Lopez. Ahora asumirá el papel principal, una evolución natural tras años de éxitos globales y colaboraciones de alto perfil, incluida su participación como presentador en Saturday Night Live.
De acuerdo con la información difundida por los organizadores, la fecha elegida, 8 de febrero, enmarca uno de los eventos televisivos más seguidos del planeta. La edición anterior, encabezada por Kendrick Lamar con SZA como invitada, registró cifras récord de audiencia, marcando el listón de lo que el nuevo show aspira a alcanzar.
Equipo creativo y producción

La producción ejecutiva estará en manos de Roc Nation y Jesse Collins, dos firmas con amplia experiencia en espectáculos en vivo de gran formato. La dirección correrá a cargo de Hamish Hamilton, habitual en ediciones memorables del Halftime, lo que anticipa una realización a gran escala y con fuerte sello audiovisual.
Desde Roc Nation, Jay‑Z valoró públicamente el impacto del puertorriqueño, subrayando su influencia y el efecto que su música tiene dentro y fuera de su isla. En paralelo, Oliver Schusser (Apple Music) enfatizó que la plataforma seguirá apoyando actuaciones que trasciendan géneros e idiomas, y que promuevan la cultura latina en el centro de la conversación pop global.
La NFL, a través de Jon Barker, puso el acento en la energía escénica del artista y en su visión creativa, dos pilares que, a juicio de la liga, garantizan una experiencia a la altura de un hito cultural de semejante magnitud. Esta combinación de productor, director y patrocinador configura un marco sólido para una puesta en escena ambiciosa.
Con esa estructura, se prevé un show de alto impacto técnico y narrativo, apoyado en recursos visuales de primer nivel y la capacidad de poner música a un vídeo. El precedente de ediciones recientes sugiere una integración fluida entre música, coreografía y tecnología, con la intención de ofrecer un relato compacto en pocos minutos y un repertorio que atraviese su discografía más reconocible, sin perder el pulso del directo.
Contexto: carrera y antecedentes

El anuncio coincide con un periodo especialmente intenso para el cantante. En los últimos meses cerró una residencia histórica en Puerto Rico con decenas de fechas en el Coliseo José Miguel Agrelot y una respuesta de público que superó el medio millón de asistentes, además de una emisión final en streaming.
En el plano de premios y reconocimientos, acumula tres Grammys y doce Latin Grammy, y llega a esta cita como uno de los artistas más escuchados en plataformas a nivel mundial. También lidera nominaciones en los Latin Grammy de la temporada, un indicador más de su peso en la industria.
Su actividad artística se extiende al cine y la moda, con apariciones en películas comerciales y colaboraciones con marcas globales. En música, ha firmado álbumes como “Un Verano Sin Ti” y proyectos recientes que han copado listas, convirtiéndose en uno de los pocos artistas de habla hispana con impacto sostenido en el mercado anglosajón, sin renunciar al español.
En entrevistas, relató que la llamada que confirmó su fichaje le pilló entrenando y que la adrenalina del momento se tradujo en una sesión extra de ejercicio. Más allá de la anécdota, el mensaje que repite es el de representación: llevar su cultura al centro del espectáculo y celebrar a quienes abrieron camino.
Con todo este bagaje, la expectativa es alta: un Halftime que mantenga el pulso de los récords recientes, que dialogue con su catálogo de éxitos y que aproveche el altavoz global del Super Bowl para reforzar el lugar de la música latina en la cultura pop, con una producción de primera línea.
La designación de Bad Bunny para el Apple Music Halftime concentra fecha, lugar y equipo plenamente definidos, y llega en el punto álgido de su trayectoria. Entre el Levi’s Stadium, el 8 de febrero y el respaldo de la NFL, Roc Nation y Apple Music, todo apunta a un espectáculo que combine ambición técnica, identidad latina y alcance mundial, con el artista puertorriqueño al frente.