Cuando una aplicación de tu iPad se queda colgada o no responde, puede ser un auténtico engorro. En muchos casos, cerrar la app y volver a abrirla es suficiente para que vuelva a funcionar con normalidad, sin tener que entrar en soluciones más drásticas. Eso sí, conviene saber cuándo hacerlo, cómo hacerlo bien y qué pasos seguir si la cosa no mejora.
También es importante tener claras dos ideas clave: por un lado, no suele ser necesario cerrar apps de forma habitual (no te hará ahorrar batería ni ganar rendimiento de forma mágica), y por otro, si tras cerrar y reabrir la app el problema sigue ahí, reiniciar el iPad suele ser el siguiente movimiento acertado. En esta guía te explicamos todo con detalle, de forma práctica y al grano.
Cuándo y por qué cerrar y volver a abrir una app en tu iPad

Lo primero: si una app se congela, muestra errores o tarda demasiado en reaccionar, cerrarla y abrirla de nuevo suele ser el remedio más rápido. Es un gesto simple que fuerza a la aplicación a arrancar desde cero, descartando posibles fallos temporales en la sesión actual.
Dicho esto, en el día a día no es buena idea estar cerrando apps continuamente. iPadOS gestiona muy bien los procesos en segundo plano y, de hecho, cerrar apps no ahorra batería ni aporta beneficios de rendimiento en condiciones normales. Solo cierra cuando hay un comportamiento anómalo: bloqueos, cuelgues o fallos que se repiten.
Otro matiz útil: a veces el problema no es la app en sí, sino la conexión de red o un recurso externo. Si intuyes que puede ser el Wi‑Fi o los datos móviles, prueba primero a verificar la conexión antes de culpar a la aplicación. Si tras confirmar que la red está bien la app sigue igual, entonces sí, toca cerrar y reabrir.
Y si tras ese cierre y reapertura el fallo persiste, no te compliques: reinicia el iPad. Un reinicio limpio puede resolver procesos colgados del sistema que estén afectando a la aplicación, y muchas veces es la forma más rápida de volver a la normalidad.
Soluciones paso a paso para resolver fallos de apps en iPad

Cerrar y volver a abrir la app
Empieza por el remedio más simple: cerrar la app y abrirla de nuevo. Es rápido y suele funcionar cuando el error es puntual.
- Abre el selector de apps recientes: en iPad sin botón de inicio, desliza el dedo hacia arriba desde el borde inferior y mantén un instante; en modelos con botón de inicio, pulsa dos veces el botón de inicio.
- Desliza a izquierda o derecha para localizar la app con problemas y, cuando la veas, desliza su vista previa hacia arriba para cerrarla.
- Vuelve a la Pantalla de inicio y toca el icono de la app para abrirla de nuevo.
Si el fallo desaparece tras este proceso, genial. Si no, conviene pasar a las alternativas siguientes porque podrían existir errores de caché, procesos bloqueados o incompatibilidades que requieran un paso extra.
Forzar el cierre de la app (si sigue dando guerra)
Cuando la app queda completamente congelada y ni siquiera puedes salir con normalidad, la idea es asegurarte de que su proceso queda fuera del multitarea. En la práctica, esto es lo que ya haces en el selector de apps: eliminar la tarjeta de la app para que deje de ejecutarse en segundo plano.
Comprueba que no quedan varias instancias de la misma aplicación abiertas (por ejemplo, cuando usas Split View o Slide Over) y cierra todas sus vistas previas. Después, vuelve a abrir la app desde su icono. Si tras un cierre forzado el problema se repite, conviene pensar que hay algo más allá del simple cuelgue puntual.
Reiniciar el iPad
Si cerrar y volver a abrir la app no arregla nada, el siguiente paso recomendado es reiniciar por completo el iPad. Un reinicio libera procesos bloqueados del sistema y puede eliminar conflictos que afectan a la app.
- En modelos con Face ID o sin botón de inicio: mantén pulsados el botón superior y uno de los botones de volumen hasta que aparezca el control deslizante para apagar.
- En modelos con botón de inicio: mantén pulsado el botón superior (encendido) hasta ver el control deslizante para apagar.
- Desliza para apagar y espera unos segundos antes de encender de nuevo el iPad.
- Abre la app y comprueba si el fallo ha desaparecido.
Este paso soluciona una enorme cantidad de incidencias. Si aun así la app sigue quedándose colgada, toca revisar el estado de la app y del sistema a nivel de actualizaciones.
Buscar actualizaciones en la App Store (y del sistema)
Los fallos inexplicables muchas veces son errores ya corregidos por el desarrollador. Antes de meterte en reinstalaciones, mira si hay una versión nueva disponible.
- Abre la App Store y toca tu foto de perfil (arriba a la derecha).
- Desplázate a la sección de Actualizaciones disponibles.
- Si ves la app problemática en la lista, toca Actualizar. Si no, puedes deslizar hacia abajo para refrescar la lista.
Aprovecha para ver si hay una actualización de iPadOS disponible en Ajustes. A veces un cambio del sistema corrige incompatibilidades que afectan a varias apps, sobre todo tras grandes saltos de versión.
Eliminar la app y volver a descargarla
Cuando nada de lo anterior funciona, toca empezar de cero con la aplicación. Desinstalar y reinstalar puede limpiar archivos corruptos, cachés persistentes o configuraciones que están causando el bloqueo.
- Mantén pulsado el icono de la app en la Pantalla de inicio y selecciona Eliminar app.
- Confirma que deseas eliminarla. Ten en cuenta que, en algunas apps, esto puede implicar pérdida de datos locales. Si la app permite copia de seguridad en la nube, verifica que esté activa.
- Abre la App Store, busca el nombre de la app y vuelve a descargarla.
- Inicia sesión si lo requiere y prueba de nuevo su funcionamiento.
Este proceso suele ser definitivo cuando el origen del problema es un archivo o ajuste corrupto. Si incluso tras reinstalar la app se sigue bloqueando, ya es momento de pensar en soporte técnico o en un problema más amplio del sistema.
Cuándo pedir ayuda técnica
Si tras cerrar y reabrir, reiniciar, actualizar y reinstalar la app persisten los errores, es razonable contactar con soporte. Puedes empezar por el desarrollador de la aplicación (desde su ficha en App Store suele haber un enlace de ayuda) y, si sospechas que hay algo del iPad que no va fino, hablar con el soporte de Apple o un servicio técnico cualificado.
Existen servicios especializados que ofrecen soluciones rápidas y fiables: diagnóstico y presupuesto en 24 horas, envíos a toda España, piezas originales o compatibles con distintas opciones de precio y garantías de hasta 12 meses. Si estás en una gran ciudad o prefieres hacerlo por mensajería, estas alternativas pueden sacarte del apuro sin complicaciones.
Consejos prácticos y buenas prácticas
Para reducir la probabilidad de cuelgues, intenta mantener el iPad y tus apps siempre actualizados. Muchas fallas recurrentes desaparecen cuando instalas un parche reciente tanto del sistema como de la aplicación.
Evita cerrar apps de forma compulsiva. iPadOS ya gestiona el consumo en segundo plano y, como señala la propia Apple, cerrar apps no mejora la batería por sí mismo. Resérvalo para cuando veas comportamientos anómalos.
Si usas la app en multitarea (Split View/Slide Over), revisa que no haya varias ventanas de la misma app provocando conflictos. Cierra todas sus vistas en el selector y vuelve a abrir solo una.
Cuando una app falle siempre en la misma acción (por ejemplo, al exportar un archivo), intenta reproducir el problema tras un reinicio o reinstalación y, si persiste, informa al desarrollador. Los reportes con pasos concretos son oro para que puedan corregir el error.

Preguntas frecuentes
¿Cerrar y volver a abrir es lo mismo que forzar el cierre?
En el iPad, cerrar una app desde el selector de aplicaciones ya implica quitarla de la memoria, lo que equivale a un cierre forzado. La diferencia práctica está en que un cierre “suave” puede ser simplemente salir de la app tocando el botón de inicio o el gesto de ir a inicio; si hay cuelgue, usa el selector y descártala.
¿Por qué Apple dice que no hay que cerrar apps para ahorrar batería?
Porque iPadOS administra la memoria y detiene procesos cuando no hacen falta. Forzar cierres a menudo provoca que, al abrir de nuevo, la app consuma más al iniciar en frío. Por eso no se ahorra batería cerrando apps de manera sistemática.
He cerrado la app y sigue congelada al abrirla. ¿Qué hago?
Prueba a reiniciar el iPad. Si tras el reinicio el problema continúa, actualiza la app y el sistema. Y, en último lugar, reinstala la aplicación para eliminar posibles archivos corruptos.
¿Puedo perder datos al eliminar una app?
Depende. Muchas apps guardan la información en la nube o permiten copia de seguridad. Antes de borrarla, verifica si los datos están sincronizados. Si no lo están, haz una copia o exportación si la app lo permite, porque la desinstalación puede eliminar datos locales.
¿Cuándo debo pensar en soporte técnico?
Si el fallo persiste después de cerrar y reabrir, reiniciar, actualizar y reinstalar, es momento de escalar a soporte. Si la app falla por un bug, contacta con su desarrollador; si crees que es algo del iPad, consulta con Apple o un servicio técnico cualificado.
La forma más eficaz de recuperar una app rebelde en iPad es seguir este orden: cierre y reapertura cuando se cuelga, reinicio del dispositivo si no mejora, actualización de la app y del sistema, y reinstalación si el fallo persiste; y si nada de esto resulta, apoyarte en soporte técnico para un diagnóstico más profundo. Con estos pasos cubres de forma ordenada las causas más comunes y te aseguras una solución rápida y sin quebraderos de cabeza.