En el post del día de hoy vamos a hablar de baterías: esas fuentes de poder ligadas a nuestros dispositivos que hacen que podamos usarlos sin depender de la red eléctrica y en concreto, nos centraremos en cómo comprobar la salud de tu batería del MacBook Pro.
Por lo que si quieres empezar a saber un poco más del apasionante mundo del litio y saber los mejores consejos para prolongar la vida de tu batería del MacBook Pro, este es tu post sin duda alguna.
¿Cómo funciona una batería de litio?
Antes de meternos en el “meollo” de cómo comprobar la salud de tu batería del MacBook Pro, creemos que es importante que sepas cómo funciona una batería de litio como las que monta nuestro portátil.
Una batería de ion de litio es un dispositivo que almacena energía química y la convierte en energía eléctrica cuando es necesaria para alimentar un ordenador, un móvil o básicamente cualquier dispositivo electrónico que requiera portabilidad. La batería de litio funciona gracias a los siguientes elementos:
Electrodos y el electrolito: la base de la batería
La batería tiene dos electrodos: un ánodo y un cátodo y en el caso de las baterías de iones de litio, el ánodo generalmente está hecho de grafito y el cátodo de un material que contiene litio, como el óxido de cobalto o el fosfato de hierro y litio.
Entre los electrodos hay un electrolito, que es una sustancia que permite que los iones de litio se muevan entre el ánodo y el cátodo cuando la batería se carga o descarga. Por lo general, el electrolito es una solución de sales de litio disueltas en un solvente orgánico.
El sistema de carga y descarga en esa solución
Cuando conectas el portátil a una fuente de alimentación, la corriente eléctrica fluye a través de la batería y durante la carga, los iones de litio son atraídos hacia el cátodo, donde se adhieren a la estructura cristalina del material del cátodo. Esto hace que el ánodo libere electrones que son recogidos por el circuito eléctrico del portátil.
Con todo ello, cuando desconectas el MacBook de la fuente de alimentación y comienzas a usarlo, los iones de litio abandonan el cátodo y viajan hacia el ánodo a través del electrolito, liberando electrones que viajan a través del circuito del portátil, suministrando energía.
Durante la carga y descarga, se producen reacciones químicas reversibles en los electrodos. Estas reacciones liberan o absorben energía, lo que permite que la batería almacene y suministre energía según sea necesario.
La BMS: lo que controla todo el proceso de carga y descarga
Es importante destacar que las baterías de iones de litio son dispositivos delicados y requieren un circuito de gestión de la batería (Battery Management System, BMS) para regular la carga y descarga, así como para proteger la batería contra condiciones dañinas como la sobrecarga, la descarga excesiva y la temperatura extrema.
Pensad en el BMS como el policía que está ahí para “regular” el tráfico de una calle abarrotada con diferentes salidas de tráfico: el trabajo tiene que estar bien balanceado, ya que un error en el proceso de carga o descarga podría tener un resultado fatal para tu portátil, que los veremos un poco más adelante.
¿Cómo detectar una batería en mal estado?
Una batería en mal estado es fácilmente detectable si revisas lo que te decimos a continuación. Cualquiera de estos síntomas puede significar que la batería está en un proceso de degradación o que directamente se está muriendo:
- Descarga rápida: Si la batería se descarga rápidamente incluso con un uso ligero, podría indicar que la capacidad de la batería ha disminuido significativamente.
- Tiempo de vida corto: Si la duración de la batería ha disminuido considerablemente en comparación con cuando era nueva, incluso después de una carga completa, esto podría ser un signo de degradación de la batería.
- Calentamiento excesivo: Si la batería se calienta anormalmente mientras está en uso o durante la carga, podría ser un indicador de problemas internos en la batería.
- Inflado: Si la batería se hincha o se expande, es una señal clara de un problema grave. Esto puede ser causado por un sobrecalentamiento interno o por la liberación de gases dentro de la batería y por mucho que veas videos en YouTube que digan que puedes “pincharla” para liberar los gases… ¡no lo hagas!
- No se carga completamente: Si la batería no se carga completamente o muestra una capacidad de carga inconsistente, incluso después de un período de carga prolongado, podría ser un indicio de un problema con la gestión de la batería.
- Mensajes de advertencia: Si recibes mensajes de advertencia en tu dispositivo indicando problemas con la batería, como «Batería no detectada» o «Reemplace la batería», dudo mucho que sea una conspiración del fabricante para intentar venderte una batería nueva.
¿Cómo comprobar la salud de tu batería del MacBook Pro
Para comprobar la salud de tu batería del MacBook Pro, afortunadamente no necesitarás ninguna herramienta, sino que el propio MacBook te avisará de gracias a su asistente que debes cambiarla.
Para hacerlo, debes acceder al apartado de Energía siguiendo estos pasos:
- Haz clic en el ícono de la manzana que está en la esquina superior izquierda de la pantalla, a fin de abrir el menú de Apple.
- Selecciona «Acerca de este Mac», donde verás información sobre tu MacBook Pro.
- Busca y haz clic en «Informe del sistema», donde podrás encontrar información más detallada y dentro de ese apartado, localiza las categorías “Hardware” y dentro de esta, “Energía”.
- En la sección «Energía», busca el apartado «Estado de la batería», donde tendrás la capacidad actual de la batería en comparación con su capacidad original, así como su estado de salud general.
Si la capacidad de la batería está cerca de su capacidad original y el estado dice «Normal», entonces la batería está en buen estado y podrás seguir usándola sin problemas, pero si te marca «Reparación recomendada», es posible que necesites reemplazarla.
¿Y qué pasa si no cambio la batería dañada de mi MacBook Pro?
Por un tiempo, se puede vivir con una batería en mal estado sin ningún problema. Pero si llevas mucho tiempo con ella (y sobre todo está hinchada), tienes la papeleta de que tengas ciertos riesgos derivados de su uso:
Sobrecalentamiento e incluso explosiones
Las baterías en mal estado pueden generar calor excesivo durante la carga o el uso normal. Este sobrecalentamiento puede provocar daños en el dispositivo debido al calor acumulado dentro del mismo o, en casos extremos, incluso provocar incendios o explosiones si afecta a componentes volátiles como los condensadores electrolíticos.
En casos extremos, como ocurre con las baterías hinchadas, estas pueden provocar incendios o explosiones debido a un sobrecalentamiento interno si coge algún componente que sea volátil o a la liberación de gases inflamables, y creo que no hace falta incidir mucho en por qué no es deseable que ocurra.
Inestabilidad eléctrica y pérdida de la información
Las baterías deterioradas pueden experimentar fluctuaciones en la salida de energía, lo que puede provocar un funcionamiento inestable del dispositivo, con apagados antes de poder guardar o a mitad de una tarea.
Esto último es muy reseñable, ya que podría resultar en fallos repentinos o pérdida de datos si no has llegado a guardar tus tareas rápido, así como la posibilidad de tener archivos corruptos en tu disco.