Si alguna vez has pensado que tus dispositivos Apple deberían entenderse solos, vas por buen camino: con Continuidad lo hacen, y muy bien. El ecosistema de Apple está pensado para que iPhone, iPad, Mac e incluso el Apple Watch trabajen como si fueran una única herramienta, enlazando tareas, contenido y conexiones sin apenas fricción y con muy poco que configurar.
Más allá del marketing, se nota en lo cotidiano: copiar y pegar entre dispositivos, pasar una llamada al ordenador, abrir en el iPad lo que estabas leyendo en el Mac o usar el iPhone como cámara del Mac para que te vean de lujo en una videollamada. Son detalles pequeños que suman mucho tiempo ahorrado y una fluidez que engancha.
Requisitos básicos y puesta a punto del ecosistema
La mejor noticia es que no necesitas instalar nada extra: Continuidad viene integrada en iOS, iPadOS y macOS, y también se apoya en watchOS para algunas funciones. Aun así, conviene preparar el terreno con un par de ajustes sencillos para que todo vaya como la seda.
Para empezar, inicia sesión con el mismo ID de Apple en todos tus dispositivos. Además, mantén activados Wi‑Fi, Bluetooth y Handoff en iPhone, iPad y Mac. En iPhone o iPad, ve a Ajustes > General > AirPlay y Continuidad y comprueba que Handoff está en verde; en el Mac, abre Ajustes del sistema > General > AirDrop y Handoff, y activa la opción correspondiente.
Como regla general, las funciones de Continuidad funcionan mejor cuando los dispositivos están cerca y en la misma red Wi‑Fi. Esto no significa que absolutamente todo dependa de esa red, pero sí ayuda a que la detección entre equipos sea inmediata y estable, especialmente para copiar y pegar entre dispositivos y para Handoff.
Hay funciones disponibles incluso en equipos no tan recientes. Handoff, por ejemplo, funciona con macOS OS X Yosemite o posterior y con iOS 8 o posterior, por lo que si tienes algún Mac veterano o un iPhone antiguo, probablemente seguirás teniendo esta continuidad básica para seguir tareas.
En el caso del Portapapeles universal, los requisitos suben un poco: necesitarás macOS 10.12 Sierra (para textos o elementos pequeños en Mac) y macOS 10.13 High Sierra o posterior para que “trague” con todo tipo de contenido; en iPhone o iPad, iOS 10 o posterior. Estos mínimos se cumplen en la mayoría de equipos que aún están en uso.

Copiar y pegar y compartir contenido entre dispositivos
Portapapeles universal: copia en uno, pega en otro
El portapapeles universal es uno de esos trucos que, cuando lo pruebas, ya no hay vuelta atrás. Puedes copiar texto, imágenes, fotos o vídeos en un dispositivo Apple y pegarlos en otro, sin cables ni intermediarios. Copia un mensaje desde el iPhone y pégalo en el Mac con CMD + V; selecciona una foto en el iPad y pégala en Pages en el Mac; o copia una URL en el Mac y pégala al instante en Mensajes del iPhone.
Para que sea instantáneo, mantén ambos dispositivos desbloqueados, conectados a la misma red Wi‑Fi y con Bluetooth activado. Si cumples los requisitos de sistema mencionados antes (macOS Sierra/High Sierra en Mac e iOS 10 o posterior en iPhone/iPad), no tendrás que hacer nada más: copias como siempre, pegas donde lo necesites.
AirDrop: compartir a un toque de distancia
Cuando te apetece enviar algo “tal cual” y sin complicarte, AirDrop es la vía rápida para pasar fotos, vídeos, contactos, documentos y mucho más a cualquier iPhone, iPad o Mac cercano. Arrastra el archivo en el Mac y suéltalo sobre el dispositivo de destino; en iPhone o iPad, toca el icono de compartir y elige AirDrop y el equipo de la persona a la que quieres enviarlo.
Si sueles mover archivos grandes, AirDrop te evita recurrir a cables o servicios en la nube. Funciona a nivel local y es terriblemente cómodo en el día a día, especialmente en entornos de trabajo con varios dispositivos Apple alrededor.
Insertar fotos y documentos escaneados desde iPhone o iPad
Otra joya muy útil es la inserción directa de fotos y documentos escaneados desde la cámara del iPhone o iPad en el Mac. Haz una foto o escanea un documento con el iPhone y aparecerá de inmediato en tu Mac, sin pasos intermedios. Esto viene de lujo para digitalizar facturas, DNI, contratos o apuntes y tenerlos al instante en Notas, Pages, Finder u otras apps compatibles.
Del mismo modo, también puedes aprovechar la Marcación y el Dibujo de continuidad: edita, firma o anota un PDF o una imagen desde el iPad con Apple Pencil (o con el dedo en el iPhone), y verás los cambios reflejados al momento en el Mac. Si te dedicas a diseño, docencia o revisiones de documentos, este flujo te quita trabajo repetitivo.

Seguir tareas, llamadas y mensajes desde cualquier pantalla
Handoff: empieza aquí, continúa allí
Handoff es pura magia práctica. Empiezas un correo, un documento, un mapa o una navegación web en un dispositivo y continúas justo por donde ibas en otro. Funciona con apps como Mail, Safari, Mapas, Mensajes, Recordatorios, Calendario, Contactos y la suite de iWork (Pages, Numbers y Keynote), entre otras.
Un detalle que sorprende: no hace falta usar exactamente el mismo navegador. Si estás leyendo en Safari del iPhone y en el Mac prefieres Brave, Handoff entiende que lo que quieres es seguir la navegación, y te abre el contenido donde toca. Lo mismo si vas de iPad a Mac con Notas o de Mac a iPhone con Mapas.
¿Dónde aparece Handoff para retomarlo al vuelo? El sistema te muestra un icono discreto que te invita a seguir con la tarea en el otro equipo. Fíjate en estas ubicaciones:
- En iPhone: en la parte inferior del selector de apps (vista multitarea).
- En iPad: en el extremo derecho del Dock, con el icono de la app que puedes abrir.
- En Mac: hacia la derecha del Dock si lo tienes abajo; si el Dock está a izquierda o derecha, verás el icono en la parte inferior del Dock.
Para usar Handoff basta con tenerlo activado en Ajustes > General > AirPlay y Continuidad (iPhone/iPad) y en Ajustes del sistema > General > AirDrop y Handoff (Mac). Los requisitos mínimos son OS X Yosemite o posterior en Mac y iOS 8 o posterior en iPhone/iPad, lo que lo hace accesible incluso para equipos que ya tienen unos años.
Llamadas y SMS desde iPad o Mac (con ayuda del iPhone)
No hace falta desenterrar el iPhone del fondo de la mochila cuando suena. Puedes contestar llamadas y enviar o recibir mensajes SMS directamente en el Mac o en el iPad, siempre que el iPhone esté cerca y con la misma cuenta de iCloud. Es mano de santo para trabajar con cascos y teclado, sin cambiar de dispositivo a cada rato.
Además de comodidad, esto te permite mantener un registro coherente de conversaciones y llamadas en el equipo en el que estás trabajando. Es ideal en entornos donde la movilidad es constante y necesitas responder al instante sin perder el hilo.
Compartir tu conexión: punto de acceso personal
Cuando no hay Wi‑Fi disponible, el iPhone te saca del apuro. Activa el Punto de acceso personal y conecta tu Mac o iPad a Internet a través del iPhone. Es especialmente útil en viajes, reuniones o visitas a clientes en las que necesitas enviar un archivo o presentar algo en remoto.
En la práctica, la integración con el Mac es muy transparente: verás el iPhone en el listado de redes Wi‑Fi del Mac y podrás conectarte con un clic, sin teclear contraseñas si estás usando la misma cuenta de iCloud.

Amplía y controla tu escritorio: Sidecar, Control Universal, AirPlay y Cámara
Sidecar: el iPad como segunda pantalla del Mac
Cuando necesitas más espacio en pantalla, el iPad es tu monitor de apoyo perfecto. Con Sidecar puedes usar el iPad como segunda pantalla del Mac para ampliar el escritorio o duplicar la pantalla principal. Desde el Centro de control del Mac, toca en Duplicar pantalla y elige el iPad; en Ajustes de Pantallas puedes colocar el iPad a derecha, izquierda, arriba o abajo para que el ratón “cruce” de forma natural.
Si además usas Apple Pencil, el lápiz se transforma en un cursor muy preciso para seleccionar, arrastrar y dibujar en apps compatibles del Mac mostradas en el iPad. Para edición de fotos, ilustración o firmas de documentos, es una combinación difícil de superar.
Control Universal: un solo teclado y ratón para iPad y Mac
Una vez enlazados, escribes en el iPad usando el teclado del Mac y saltas con el cursor de un equipo a otro. Si colocas el iPad en el lado real donde está físicamente, la transición del ratón será intuitiva. Es perfecto para escribir en apps del iPad sin tener un teclado dedicado para la tablet.
AirPlay: envía audio y vídeo a lo grande
Cuando toca compartir contenido en una pantalla mayor, AirPlay está para eso. Puedes transmitir vídeo y audio desde el iPhone o iPad al Mac; o del Mac a un Apple TV o a un televisor compatible con AirPlay 2. Es muy cómodo en reuniones para poner una demo en grande o para ver un vídeo sin cables de por medio.
La ventaja es que, si todo está en la misma red y con la sesión de iCloud correcta, apenas hay fricción: eliges el destino AirPlay y listo. Muchas apps ya integran el botón de AirPlay para que no tengas que salir de la aplicación.
Cámara de continuidad: usa el iPhone como webcam del Mac
Para videollamadas con buena calidad, el iPhone es un salvavidas. La Cámara de continuidad permite usar el iPhone como cámara web del Mac. En los Mac mini suele ser buena idea conectarlo por cable para máxima estabilidad; en el resto de Mac puedes enlazarlo de forma inalámbrica si ambos están en la misma Wi‑Fi.
Ten en cuenta los requisitos: macOS 13 Ventura o posterior en el Mac y iOS 16 o posterior en el iPhone. Si cumples, bastará con seleccionar el iPhone como fuente de vídeo en tu app de videollamadas favorita. Si lo montas en un soporte estable (mejor si es magnético), quedarás encuadrado de lujo.
Desbloquear el Mac con el Apple Watch
Una de esas cosas que ocurren sin que te des cuenta y se agradecen todos los días: usa el Apple Watch para desbloquear el Mac o aprobar solicitudes de autenticación. En Ajustes del sistema del Mac, entra en Contraseña de inicio de sesión y activa la opción de desbloqueo con Apple Watch. A partir de ahí, si llevas el reloj puesto y a mano, el Mac se desbloqueará al tocar cualquier tecla.
En la práctica, esto te ahorra teclear la contraseña constantemente, sobre todo si usas un Mac sin Touch ID o si, como en el caso de un Mac mini, dependes de un teclado externo sin sensor. Es simple, rápido y seguro.

Continuidad convierte al iPhone, iPad, Mac y Apple Watch en piezas de un mismo puzle que encajan sin esfuerzo: copias en un dispositivo y pegas en otro, retomas tareas con Handoff justo donde las dejaste, gestionas llamadas y SMS desde el Mac o el iPad, compartes tu conexión cuando no hay Wi‑Fi, amplías tu escritorio con Sidecar, te mueves con un solo teclado y ratón gracias a Control Universal, proyectas contenido vía AirPlay y elevas tus videollamadas usando el iPhone como cámara. Con requisitos asequibles y una configuración mínima, ganas agilidad, evitas interrupciones y trabajas con la sensación de que todo “simplemente funciona”.