¿Hora de limpieza de los AirPods? Pues pongámonos manos a la obra, en este artículo voy a explicarte detalladamente lo que debes y no debes hacer a la hora de limpiar AirPods.
Han pasado más de 15 años desde que el primer teléfono iPhone fuera lanzado, poco tiempo después, fallecería su reconocido líder, Steve Jobs. En este periodo, han pasado muchas cosas, y aunque la empresa Apple no se ha mostrado especialmente innovadora, sí se ha ido perfeccionando día tras día.
En diciembre de 2016 fueron lanzados los primeros AirPods, unos auriculares de alta calidad totalmente inalámbricos que funcionan por Bluetooth. Hasta el día de hoy han sido lanzadas tres generaciones, cada una con varios modelos y accesorios incluidos. Representando un gran competidor de este mercado, mostrándose especialmente conveniente si tienes otros dispositivos de Apple.
¿Cómo limpiar AirPods?
Pero basta de historias, vayamos al grano, veamos cómo sacarle el brillo a nuestros compañeros inseparables. Primero debes saber que existen 3 generaciones de AirPods, cada una con varios modelos, y algunos modelos con diferentes accesorios que podrían necesitar diferentes métodos para la limpieza.
Empecemos por una limpieza de rutina, es la que hacemos cuando después de mucho tiempo de utilizar nuestros audífonos, ya toca darles una limpiadita.
Lo ideal es utilizar algún paño o pieza de tela humedecido con alguna sustancia desinfectante. Algunos de los desinfectantes que puedes utilizar, son estos:
- Alcohol isopropílico al 70 % (frotar con una toallita)
- Alcohol etílico al 75 %
- Toallitas desinfectantes Clorox
El proceso sería bastante simple, todo lo que tienes que hacer es:
- Limpiar suavemente las superficies externas, utilizando una pieza de tela seca y sin pelusas
- Evitar la entrada de líquido por las aberturas
- Pasar un hisopo seco para limpiar las mallas del micrófono y de la bocina
- No usar herramientas afiladas ni sustancias abrasivas
Muy importante aquí es saber qué es lo que debes evitar, y no son pocos los peligros a la hora de limpiar tus auriculares inalámbricos; te explicamos qué acciones debes evadir a toda costa o podrías quedarte sin cascos.
- Evita aplicarle desinfectante a la malla de los EarPods, AirPods y AirPods Pro
- No apliques desinfectante sobre la diadema de malla tejida y las almohadillas de los AirPods Max
- Trata ante todo de no utilizar productos con blanqueador o peróxido de hidrógeno
- Evita humedecer las aberturas
- No sumerjas tus cascos en ningún agente de limpieza
Si los auriculares se exponen a sustancias que lo puedan manchar
Aprende a limpiar AirPods que han entrado en contacto con sustancias que puedan dejar manchas o provocar algún daño (jabones, detergentes, disolventes, perfumes, ácidos, aceites y muchas otras).
- Frota tus audífonos con una pieza de tela ligeramente humedecida para luego secarlos con otro paño suave y totalmente seco
- Déjalos secar completamente antes de ponerlos a cargar o usarlos
Resistencia al agua
Una advertencia válida es la de no utilizar ninguno de tus auriculares debajo del agua (tampoco los pongas debajo del grifo), ya que mientras algunos ofrecen cierta resistencia al agua y al sudor, la sumersión es algo para lo que no están preparados. A continuación te explico cuales modelos de AirPod (y accesorios) son resistentes al agua y cuáles no.
Son resistentes al agua y al sudor:
- Los AirPods Pro (1ª y 2ª generación)
- Los AirPods (3ª generación)
- El estuche de carga Lightning para AirPods (3ª generación)
- El estuche de carga MagSafe para AirPods o para AirPods Pro (3ª y 2ª generación, respectivamente)
No son resistentes al agua:
- Los AirPods (1ª y 2ª generación)
- El estuche de carga Lightning para AirPods (1ª y 2ª generación)
- El estuche carga inalámbrica para AirPods (1ª y 2ª generación)
- Los AirPods Max
- El Smart Case
- El estuche de carga MagSafe para AirPods Pro (1ª generación)
- El estuche de carga inalámbrica para AirPods Pro (1ª generación)
Ninguno de los dispositivos mencionados está preparado para la sumersión, y a pesar de la resistencia relativa a ciertos líquidos, la propia empresa de la manzana mordida recomienda especial precaución con la entrada de líquido a las aberturas de tus audífonos.
Si los auriculares llegan a entrar en contacto con cualquier líquido o se humedecen, considera pasarle un paño de microfibra seco. Si necesitas secar el estuche, solo déjalo reposar boca abajo con la tapa abierta.
Evita utilizar cualquiera de tus dispositivos mientras aún está mojado.
Una buena noticia es que en muchos casos, si tus AirPods se dañan por haber entrado en contacto con un líquido, podrías solicitar un remplazo a Apple.
Limpiar partes especiales de los AirPods
Limpiar almohadillas y diadema (AirPods Max)
- En una taza de agua (250 ml), añade una cucharada (5 ml) de detergente
- Ten separadas las almohadillas de los auriculares
- Toma una pieza de tela suave y sin pelusas, humedécela ligeramente con la solución preparada en el primer paso
- Frota con el paño húmedo las almohadillas y la diadema (al limpiar la diadema, sujeta los auriculares hacia abajo, así evitarás la entrada de líquido en el punto de sostén de la diadema)
- Después de un minuto de reposo, prepara un paño humedecido con agua corriente para frotarlo y retirar la solución de las partes de tus cascos
- Luego haz lo mismo pero con paños secos, suaves y sin pelusa para eliminar la humedad
- Antes de volver a ensamblar tus AirPods para utilizarlos, déjalos secar por un día entero
Limpiar almohadillas (AirPods Pro)
- De haber agua u otro líquido en la almohadilla, dale unos toquecitos al AirPod contra una pieza de tela (con la abertura de la almohadilla hacia abajo)
- Saca las almohadillas de cada AirPod y enjuágalas un poco, no utilices ningún producto de limpieza
- Frota las almohadillas con una pieza de tela seca y sin pelusas
- Una vez que ambas almohadillas estén completamente secas, podrás volver a colocarlas en cada AirPod; ten en cuenta la forma ovalada de las almohadillas para ponerlas
Definitivamente es importante cuidar la limpieza de nuestros AirPods, además de saber cómo hacerlo, así podemos preservar la salud de nuestros equipos y asegurarnos una calidad óptima de sonido. Además, mantener nuestros audífonos inalámbricos limpios y secos no solo aumenta la comodidad y evita que se deterioren, sino que previene un posible caso de irritación de la piel.
Y esto es todo, la calidad de los AirPods es indiscutida, pero nunca está de más prestarle un poco de atención a su mantenimiento. Con esto dicho, te exhorto a qué me cuentes en los comentarios cómo y cada cuánto tiempo lavas tus audífonos, seguro le servirá de referencia a otros usuarios.