Estamos en la era de la tecnología móvil. Nuestros smartphones cada vez tienen cámaras más potentes, y resulta cada vez más fácil compartir las fotos que hacemos con otra gente. Esto ha dado lugar a nuevas formas de relacionarnos con los demás, incluyendo nuestras parejas o ligues, con prácticas como el “sexting” o, lo que es lo mismo, el envío de mensajes, fotografías y vídeos subidos de tono.
Lo malo es que estas fotografías y vídeos se quedan en el carrete de nuestros móviles y a veces suceden accidentes… y ya no hablamos sólo de casos extremos, como de aquel “Celebgate” que tuvo lugar en 2014, cuando cientos de fotografías muy personales de varias famosas fueron hackeadas y difundidas en internet: puede que a alguno os haya pasado alguna vez el que un amigo os pase el móvil para enseñaros unas fotografías, y al ir pasando para ver más, os hayáis encontrado con alguna imagen comprometedora… o al contrario, que el móvil en el que hay alguna fotografía subidita de tono sea el vuestro, y algún amigo la acabe viendo accidentalmente.
Pues eso es lo que pretende evitar “Nude”, una aplicación creada por dos jóvenes desarrolladores de 21 años, Y.C. Chen y Jessica Chiu, que escanea el carrete de un smartphone y utiliza el aprendizaje mecánico para detectar las fotos que incluyen desnudos, moviéndolas a una biblioteca privada dentro de la aplicación, que está bloqueada y protegida por un PIN, para que de ese modo nadie pueda curiosear en ella.
Según relata Jessica Chiu, la idea se le ocurrió tras hablar con algunas actrices de Hollywood como parte de otro proyecto relacionado con el cine. Todas ellas decían tener imágenes comprometidas en sus teléfonos o sus portátiles, y tenían dudas de que estuvieran seguras. Además, también le ocurrió en alguna ocasión el que un amigo le pasara el teléfono para que viera alguna fotografía y, de forma accidental, acababa por ver algún que otro desnudo.
Por el momento, la aplicación sólo identifica automáticamente los desnudos incluidos en fotografías, por lo que si un usuario tiene algún vídeo comprometido guardado y quiere almacenarlo en la aplicación, tendrá que hacerlo manualmente.
Además de guardar las fotografías y los vídeos dentro de una biblioteca protegida con un PIN, la aplicación también nos avisa si alguien intenta entrar en ella, utilizando la cámara frontal para hacerle una fotografía, de modo que nos enteraremos de quien ha intentado cotillear en nuestras fotos íntimas.
Gracias a CoreML, el framework de aprendizaje automático que Apple introdujo con iOS 11, todo esto se lleva a cabo en el dispositivo, lo que significa que las fotografías nunca salen de nuestro teléfono, lo que evita que puedan ser hackeadas de un servidor.
Nude puede descargarse de forma gratuita, aunque el servicio en sí cuesta 1 dólar al mes. También hay que tener en cuenta que el análisis en el dispositivo es sólo posible si tenemos iOS 11 instalado. Para iOS 10 y versiones anteriores, la aplicación utiliza la tecnología Rekognition de Amazon, por lo que es recomendable actualizar a iOS 11 para conseguir los mejores resultados.
Por ahora Nude sólo está disponible para iOS, pero sus responsables están trabajando en una versión para Android.